Las hamburguesas son una de las comidas más populares, más versátiles y más deliciosas, pero también suelen ser consideradas una de las peores saboteadoras a nuestros buenos propósitos de alimentarnos de manera saludable y llevar una vida más sana. Una hamburguesa común de un restaurante de comida rápida puede tener entre 600 y más de 1000 calorías, excediendo por mucho lo que una persona promedio debería consumir en una sola comida. Sin embargo, la realidad es que no necesitas renunciar a este sabroso platillo para comer mejor; basta con hacer algunos cambios y podrás seguir disfrutando de una buena hamburguesa de vez en cuando.
Omite el pan: Evita las calorías extra que contiene el pan, en especial cuando es blanco, y disfruta de tu hamburguesa sola. Si la sola idea te parece absurda, considera cambiarla por una versión más sana, como elegir pan integral, o usar hongos portobello en lugar del pan de hamburguesa.
Hamburguesas alternativas: Hamburguesa no tiene que significar carne. Hoy en día puedes encontrar todo tipo de hamburguesas, incluyendo de pescado, de pavo, o versiones vegetarianas hechas de tofu o de legumbres. Es fácil conseguir estas opciones en cualquier supermercado, pero también puedes tomarte el tiempo de prepararlas tú mismo, ya que no son difíciles de hacer, y de este modo puedes sazonarlas o personalizarlas según tu preferencia.
Elige una mejor salsa: Una gran cantidad de las calorías y la grasa en una hamburguesa viene de las salsas procesadas, como la mayonesa y el ketchup. Opta por el guacamole, la salsa de tomate casera, o la mostaza, una de las mejores alternativas en condimentos ya que tiene bajas cantidades de grasa y predominan en ella las grasas no saturadas.
Busca ingredientes bajos en grasa: Si bien para muchos una hamburguesa debe tener queso, considera quesos que son naturalmente bajos en grasa, como el queso feta, o si no, opta por añadir una cantidad más moderada. Incluye vegetales con mucho sabor que sean de tu preferencia, como el tomate, el pimiento asado o los champiñones.
Si estás preparando tus hamburguesas en casa, busca recetas para inspirarte a probar cosas nuevas, como por ejemplo, estas hamburguesas mexicanas de porotos con pico de gallo, o estas sencillas hamburguesas caseras de pavo. Por otra parte, si decides pedir hamburguesas a domicilio, no olvides que puedes modificar tu orden, pidiendo vegetales extra, ensaladas como acompañante, o incluso buscando restaurantes que ofrezcan opciones de hamburguesas vegetarianas o no tradicionales.
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